Cuando salieron de la casa y apagaron el incendio, el equipo de bomberos se sentó a tomar aire y descansar. En ese mismo instante un fotógrafo del periódico de Carolina del Norte, cuenta que vió a la perra mirando desde lo lejos al bombero, y luego logró tomar esta fotografía. La perra se acercó y besó al bombero, agradeciéndole por haber salvado no solo a ella sino que también le salvó la vida a los perritos que llevaba dentro; la perra estaba embarazada.
Semanas después nacieron cinco hermosos cachorros.
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